Las pavías de bacalao son uno de los platos con solera por excelencia y poco margen a la varguandia. Contra todo pronóstico, marinado, rebozado y fritura forman un combo imbatible pero no siempre de fácil ejecución. Por ello, recogemos las mejores versiones de este apetitoso bocado en Sevilla. Sin más dilación, nuestros 10 lugares predilectos para degustar uno de los platos estrella de Sevilla: las pavías de bacalao.
El Rinconcillo
Hablar de las mejores pavías de bacalao y no mencionar El Rinconcillo sería un delito, ya que es una de las tapas más demandadas en la historia de su barra. Su rebozado es uno de los mejores y, aunque ellos te ofrecen con toda la amabilidad del mundo la receta de su plato estrella en web (con el permiso de las espinacas con garbanzos), tratar de hacerla en casa es, en nuestra opinión, una estupidez. Vengan a probarla en persona.
📍 c/ Gerona, 40
Bar Benito
¿Ir hasta el Tiro de Línea (si no eres de tal barrio, claro) para comerte unas pavías? Definitivamente la respuesta es sí, siempre y cuando el sitio sea el Bar Benito. Ojo con esta delicia que llevan años elaborando con mucho mimo en el número 16 de la calle Serrano y Ortega. Sus pavías de bacalao son un escándalo y su terracita, siempre ambientada, dan buena fe de ello.
📍 c/ Serrano y Ortega, 16
Bodega Góngora
La pavías de bacalao de Bodega Góngora crujen como las que más. Se reservan para su elaboración algún que otro ingrediente infalible. El resultado es el de un bacalao jugoso con una textura gruesa y crocante en su exterior. Aquí lo sirven con bien de alioli o salsa tártara, un añadido delicioso que los lectores sabrán apreciar.
📍c/ Albareda, 5
Casa Ricardo
Que sus afamadas croquetas precedan a este lugar no es indicativo de que aquí no se cocinen otros manjares a la altura. Y es que las pavías de bacalao que se sirven en Casa Ricardo no son cosa menor.
📍 c/ Hernán Cortes, 2
Blanca Paloma
No es casualidad que sea uno de los bares más transitados de Triana y conocido como un templo del tapeo en el barrio. Es un lugar barato, con raciones contundentes y unas pavías de bacalao, que si bien no es el plato más saludable de la hispalense, desde luego no están para hacerle ningún feo.
📍 c/ Pagés del Corro, 86
Blanco Cerrillo
En este artículo te contamos que el olor de su adobo se podría distinguir en cualquier parte del mundo y es que cada vez que pasamos por la calle Tetuán y nos llega esta fragancia, empezamos a salivar.
📍 c/ José de Velilla, 1
La primera del puente
Es un lugar donde la fritura abunda y se combina de maravilla con un par de cañas. Se sirven pavías de bacalao y de merluza y tiene una terraza con vistas maravillosas al Guadalquivir. Es uno de los mejores lugares de la calle Betis para echar un cerveceo y tapear y además sus pavías permanecen incólumes después de 50 años.
📍 c/ Betis, 66
Bodega Palo Santo
En esta bodega se juega con las tapas de solera y se les añaden algunos cambios, siendo las pavías de bacalao un buen ejemplo de ello. Es el único local de Sevilla que las sirven con guarnición de una crema de sobrasada y miel y a diferencia de otros establecimientos la pavía no es aceitosa, sino que tiene un interior jugoso y una corteza crujiente.
📍 Plaza de la Gavidia, 5
Baco cuna 2
No solo nos encanta su local con patio andaluz y repleto de plantas en un edificio cuya estructura fue diseñada por Aníbal González, sino que los bacalovers encontrarán un local en el que destaca el bacalao en todas sus variantes: ahumado en aceite, en pavías, croquetas y en tempura negra.
📍 c/ Cuna, 2
Casa Morales
Nos gusta porque es buen lugar para ir de cañas con amigos por la zona de la Catedral, no es excesivamente caro y tiene ese encanto de bodega de toda la vida (se fundó en 1850). El trío de tapas sagrado que debes pedir aquí es el siguiente: la carrillada, las espinacas y las pavías que son tamaño XXL. Eso sí, te avisamos que lo más seguro es que tengas que comer de pie.
📍 c/ García de Vinuesa, 11