
En las inmediaciones del verano dos de los grandes templos consagrados al dulce en Sevilla deciden unirse para elaborar una propuesta deliciosa y refrescante. Estamos hablando de la alianza entre Manu Jara y Heladería Bolas, que ha dado como resultado uno de los caprichos dulces más prometedores de la ciudad: el helado de palmera.
Con este proyecto a cuatro manos han logrado construir un helado artesanal que concentre el sabor de las exitosas palmeras de Manu Jara.
La artesanía, la naturalidad de los ingredientes, la fidelidad a los sabores y los altos estándares de calidad que ofrecen a sus clientes son algunas de las consignas que comparten Manuel Jara y Rocío Cañizares, maestra heladera de Heladería Bolas.
Lo mejor de cada chef condensado en esta creación que el comensal podrá encontrar por tiempo limitado en los espacios de ambas firmas en Sevilla. Estos son, a la sazón, las dulcerías de Manu Jara en Triana (calle Pureza) y El Corte Inglés y las Heladerías Bolas de Orfila, calle Feria y Alfalfa. En concreto, podrá degustarse desde el 19 de mayo de 2023.
El helado de palmera, el postre del verano
Algunos de los productos de altísima calidad que ensamblan la receta de este helado son la mantequilla de Normandía con que se prepara la palmera o la leche fresca de Alcalá de Guadaíra, presente en el helado de Bolas. En suma, el helado de Palmera combina la textura crujiente de las capas de hojaldre caramelizado de la palmera, los aromas a mantequilla y la suavidad y frescura del helado.
Para Manuel Jara trabajar con Heladería Bolas es “una oportunidad para ofrecer a nuestra clientela habitual un producto de éxito, como es nuestra palmera clásica, en un formato más refrescante con la llegada del calor y qué mejor que hacerlo con una experta heladera”.
En palabras de Rocío Cañizares, “trabajar con Manuel supone un reto para nosotros, pues es un referente que hemos tenido desde siempre, nos hace mucha ilusión haber creado este helado que será una experiencia única”.