Descubrir la Sevilla del Barroco implica hacer un viaje en el tiempo para trasladarnos a los siglos XVII y XVIII, una época de esplendor artístico para la ciudad hispalense. Este arte barroco fue el resultado de la expresión de la Contrarreforma Católica.
Este fervor religioso se tradujo en un periodo muy intenso en lo que respecta a la bellas artes (Velázquez, Murillo, Zurbarán…), pero también nos ofreció algunos de los edificios que hoy todavía podemos visitar para admirar el Barroco sevillano:
Real Fábrica de Tabacos
Esta obra del siglo XVIII se caracteriza por ser uno de los edificios industriales más grandes de Europa y por albergar la primera fábrica de tabacos de Europa. Actualmente es la sede del rectorado de la Universidad de Sevilla.
Hospital de los Venerables
En este edificio del siglo XVII la Hermandad de El Silencio dio asilo en el año 1627 a los sacerdotes ancianos con escasos recursos. Fue fundado por el canónigo Justino de Neve, mientras que el arquitecto encargado de levantar el edificio fue Leonardo de Figueroa, responsable de obras como la iglesia de San Luis de los Franceses. En la actualidad, es la sede del Centro Velázquez.
Iglesia de Santa María la Blanca
Es uno de los templos de la arquitectura barroca en Sevilla más importantes. Es conocido como el «templo de las 3 religiones» porque fue mezquita en el siglo X, sinagoga en en el siglo XII y templo cristiano a finales del siglo XV con la expulsión de los judíos. Es la sede de la Hermandad del Rosario de Nuestra Señora de las Nieves, por lo que también se conoce como la Iglesia de Santa María de las Nieves.
Iglesia de la Magdalena
Es la antigua iglesia del Convento de San Pablo el Real y data del siglo XVIII. Es otra obra del arquitecto Leonardo de Figueroa y destaca su barroco de 18 metros de altura. Desde 1970 es Bien de Interés Cultural. Actualmente es la sede de la Hermandad Sacramental de la Magdalena, de la Hermandad de Nuestra Señora del Amparo, de la Hermandad de la Quinta Angustia, de la Hermandad de Montserrat y de la Hermandad del Calvario.
Palacio de San Telmo
Se construyó en 1682 con el fin de albergar el Colegio Seminario de la Universidad de Mareantes. A partir de 1849 se convierte en la residencia de los Duques de Montpensier. Es obra de Leonardo de Figueroa y su capilla es una joya del arte andaluz.
Iglesia de San Luis de los Franceses
Es un templo católico de Leonardo de Figueroa construido entre 1699 y 1730 por encargo de la Compañía de Jesús. Destaca el retablo mayor, una obra de Duque Cornejo. También se pueden ver en su interior pinturas murales de Lucas Valdés.
Capilla de San José
Este templo barroco del siglo XVI se encuentra en la calle Jovellanos y es curioso porque se levantó a instancias de un gremio de carpinteros, lo cual les costó un pleito con los arquitectos, ya que un carpintero no tenia autorización para hacer los planos de un edificio. Desde 1964 está a cargo de la Orden Franciscana de los Capuchinos.
Iglesia del Salvador
Es la iglesia más grande de Sevilla después de la Catedral. Se trata de un templo barroco que se levantó donde antes había la mezquita de Ibn Adabbas, de la que se conserva el patio de oración y la base de la torre alminar.
Palacio Arzobispal
Fue el lugar de residencia de obispos y arzobispos de sedes episcopales, además de militares y nobles. En la actualidad, reside el cardenal de Sevilla y en su interior podemos ver la tercera pinacoteca más importante de la ciudad. Durante la ocupación francesa fue la sede de la Comandancia General del Ejército y residencia del mariscal Soult y sus oficiales. Su portada principal que da a la plaza de la Virgen de los Reyes se considera como una de las mejores del barroco sevillano.
Iglesia del Buen Suceso
Se construyó en el siglo XVII, aunque pertenece a los Carmelitas Descalzos desde el siglo XIX. La iglesia tiene importantes obras del barroco de Martínez Montañés, Alonso Cano y Pedro Roldán. Es el único vestigio que queda del Hospital del Buen Suceso.
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