
En la calle feria se sucede uno de los fenómenos más significativos de la costumbre visual. Y es que el bar Curros pasa inadvertido como tal y no son pocos quienes creen que se llama Churros y que, en efecto, se sirven sendas viandas matutinas. Así con tanta cartelería que anuncia recodos secretos cuya singularidad, por defecto del hábito, no llama nuestra atención. Al vivero Sujardín, pegadito a la muralla de Sevilla que sigue en pie, le ocurre parecido. Hasta ahora, que ya no dejarás de visitarlo cuando pases por Muñoz León.
Sujardín, un vivero selvático en el centro de Sevilla
A pocos pasos de San Julián o el arco de la Macarena, el barrio encierra este espacio dedicado a la botánica. Puro vergel, plantas y flores de toda clase sin necesidad de salir de la ciudad por donde has pasado cientos de veces.
Lo tienes desde hace años junto a la Puerta de Córdoba y la iglesia de San Hermenegildo. Merece la pasearse entre las flores que habitan este espacio, desde tesoros singulares a las clásicas gitanillas.
Dolors Batlló regenta este reducto selvático donde también se pueden adquirir ciertos productos de la huerta. Variedades de bonsái, plantas de interior, cactus, girasoles u orquídeas llenan de color este rinconcito.
En suma, no tendrás que desplazarse a los consabidos viveros fuera de Sevilla. El vivero Sujardín abre de 10:00 a 14:00 y de 17:30 a 20:30 horas. Sábados y domingos hasta las 14:00 horas.