Mires donde mires en Mercer Plaza Sevilla se respira el sosiego, un ritmo hecho de otra pasta. Como si el tiempo se espesase y solo hubiese espacio para una copa de champán, el murmullo del agua en la piscina o el silencio de habitación que dispone de carta de almohadas. Es fácil acostumbrarse al lujo y, por eso, detallamos cómo es alojarse en este céntrico hotel, ideal para una primera visita a Sevilla, como destino de celebración o, sencillamente, para entregarse al descanso en una de las urbes más bonitas del mundo.
Entre los hermosos edificios que custodian la Plaza de San Francisco destacan dos inmuebles decimonónicos regionalistas. Hablamos de los palacios burgueses de Juan de Talavera Heredia —muchas de las casas más bellas de Sevilla son suyas, al igual que el edificio Telefónica o el diseño de los Jardines de Murillo— y José Espiau Muñoz, responsable, entre muchas otras, de La Adriática o el Hotel Alfonso XIII.
Es en los números 11 y 12 de la plaza que se ubica este lujoso hotel de la firma Mercer. Un refugio con apenas 25 habitaciones y suites que son un despliegue de diseño. Un entorno sensacional y su servicio, a un tiempo cercano y sensible en cada detalle, elevarán sin duda tu estancia en la ciudad.
Todas las prestaciones de un 5 estrellas
Desde las alturas su alucinante terraza 1912 corona la ciudad ofreciendo una carta de cócteles y tapas para ver el ocaso, incluso si quieres, desde la piscina.
El interior combina el peso de su historia —elementos platerescos, detalles modernistas, los remates renacentistas de la fachada, los azulejos sevillanos propios del albor del siglo XX e inclusive los restos de la muralla del siglo III— con materiales naturales y una estética que rezuma lujo y reposo.
Las habitaciones y suites no son ajenas a esta dinámica. Techos elevadísimos, una paleta de tonos azulados, verdes y añiles y baños que casi hacen las veces de spa.
Cobijos con todo lo que cabe esperar (y más) de un cinco estrellas: carta de almohadas, televisores indecentemente grandes, vestidor o la posibilidad de tomar tu desayuno desde la cama.
Y su sofisticada terraza, un regalo que ameniza las tardes estivales, bien desde su charca o con una copa al atardecer. Pretextos, todos ellos, para encerrarse entre los muros de este exclusivo hotel.
Tres espacios gastronómicos
Mercer Plaza Sevilla disgrega su oferta gastronómica en tres espacios diferenciados.
El servicio de desayuno es mayúsculo. Una mesa repleta de pequeños bocados dulces recibe al huésped antes de adentrarse en las profundidades de sus salones matutinos. Y es que podrá escoger entre desayunar sobre los restos de la muralla o en su coqueto patio interior.
Un despliegue de estímulos: zumo recién exprimido, bol de frutas frescas, café, tostadas, bollería artesanal, cereales y una carta de platos calientes —desde un capítulo dedicado a huevos y revueltos hasta tortitas y otros dulces elaborados al momento—.
La mejor de las noticias es que cualquiera puede disfrutar de su ágape matutino aunque no esté hospedado en el hotel. Se sirve bajo reserva de lunes a domingo en horario de 8:00 a 11:00 horas.
Así sucede con la terraza y su picoteo gourmet o el propio restaurante del hotel, una agradable sorpresa.
¿Cómo es el Bar Plaza del Mercer?
Del Bar Plaza se desprenden recetas tradicionales que integran de forma el espíritu culinario del sur otorgándoles pinceladas de modernidad. De ello se encarga la chef sevillana Gema Cuaresma Rivero, cuya trayectoria comprende otros reputados alojamientos como el Hotel Don Ramón 5*GL.
Una selección de productos de la tierra, como jamón ibérico o tomate de Los Palacios; y recetas sofisticadas que beben de la solera. Así sus cremosas croquetas, que no desmerecen una buenísima posición entre las mejores de la ciudad, la ensaladilla de gamba blanca de Huelva o los chipirones con crema de gamba roja.
La carta comprende otras propuestas, como cola de toro guisada o solomillo de cerdo ibérico con salsa de ajo asado. En este caso, Bar Plaza promete precios comedidos y el comensal podrá comer sobradamente en torno a los 35 euros.
1912, una terraza histórica
Uno de los mayores valores de esta rooftop es la caída del sol por el Aljarafe sevillano. Una experiencia más sosegada sobre el bullicio de la ciudad justo cuando la brisa empieza vespertina empieza a dejarse notar.
Hay que atravesar el sofisticado hall de Mercer Plaza Sevilla para ascender hasta su terraza. 1912 se distribuye en tres niveles que nos permiten degustar sus cócteles y snacks o incluso, para huéspedes del hotel, disfrutar del solárium o la alberca.
Así, además de los clásicos, Terraza 1912 ofrece una selección de bocados para acompañar sendos tragos.
Propuestas sencillas y a un tiempo suculentas para llenarse el buche con vistas. Como el sándwich en pan de focaccia con brie y jamón ibérico, brioche con pesto, crema de espinacas y queso ahumado o el de de tartar de atún con crema de aguacate y salsa de ajoblanco.
Además, la terraza puede reservarse para eventos, ya sea deforma parcial o completa, para celebraciones de todo tipo.
¿Cuánto cuesta alojarse en el Hotel Mercer Plaza Sevilla?
Una de las grandes preguntas que uno formula cuando piensa en experiencias tan lujosas como esta es cuánto el precio que entraña disfrutarlas. En este caso, dormir en el centro de la ciudad en uno de sus escasos (aunque cada vez más frecuentes) hoteles de cinco estrellas gran lujo está en torno a 230 € la noche en temporada baja.
En función de las fechas escogidas, fin de semana o algunas de sus habitaciones premium, el precio puede superar los 1.000 € por noche.