
Sevilla atesora su propio vademécum iconográfico, con multitud de inusitadas leyendas e historias en torno a las imágenes que embellecen sus iglesias, museos y hermandades. La del Cristo del Cachorro es una de ellas aunque la que nos ocupa es una de las representaciones insólitas entre las mujeres del Santoral: hablamos de Santa Librada.
Se dice que la Santa Librada del Salvador es como la calavera con la rana en la cabeza del pórtico de la Universidad de Salamanca. Hay, no obstante, cierta distancia en esta analogía. Si bien la calavera con la rana siempre estaba fija la Santa Librada cambiaba de posición periódicamente, de tal forma que resultara más difícil de hallar por parte de los devotos.
Actualmente ya no ocupa aleatoriamente ningún retablo, sino que tiene un lugar fijo en la Hermandad de Pasión en la Iglesia del Salvador.

La macabra historia de la Santa Librada
La historia de la Santa Librada es una de las leyendas que más conmocionó a la sociedad por la crueldad de los hechos acontecidos en el siglo VIII. Ella era nonelliza (en un parto nacieron nueve hermanas) y su madre las repudió y entregó a una esclava cristiana que las bautizó y se prodigó a sus cuidados.
Su padre era el rey de Portugal y la prometió en matrimonio al rey moro de Sicilia. Con tal de evitar este enlace hizo voto de castidad y le imploró a Dios para que se convirtiera en un ser horrible y repulsivo.
Así, a medida que rezaba, sus uñas se rompían y con la desnutrición y el desequilibrio hormonal el vello creció sobremanera en su rostro y cuerpo. De hecho, es por esta razón que la Santa Librada se representa como una mujer barbuda.
Las Santas crucificadas que hay en Sevilla
El rey moro rompió el conflicto al ver su fealdad y su padre, colérico, la acusó de herejía y la mandó crucificar. Es por ello que es la única virgen crucificada que tenemos.
En todo caso, la del Salvador no es la única imagen de la misma que podemos ver en Sevilla. Hay otras dos representaciones de esta torturada Santa: en la Iglesia de San Nicolás y en la Catedral de la ciudad.