La Facultad de Bellas Artes, el Hospital de las Cinco Llagas o el Teatro Álvarez Quintero son algunos de los lugares de Sevilla más conocidos por su faceta paranormal. También pertenecería a este grupo un palacete residencial de estilo francés ubicado en la Alameda de Hércules, más conocido como la Casa de la Sirenas. Este edificio siempre ha estado rodeado de un hálito misterioso debido a los testimonios de sus habitantes que afirmaban escuchar murmullos, golpes o sonidos de pasos inexistentes. Los vecinos que han habitado el palacio, sostienen que había un fantasma entre ellos, de cuya existencia nos habla una leyenda.
El palacete se construyó por iniciativa de don Lázaro Fernández de Ángulo, marqués de Esquivel, en la Alameda de Hércules, la zona predilecta de la clase pudiente de la época. Se bautizó con el nombre del «Recreo de la Alameda» y el arquitecto que llevó a cabo la obra fue Joaquín Rodríguez Ayarragaray, que culminó su proyecto en 1864.
El palacio contaba con un patio central, jardines de estilo francés y unas rampas laterales a ambos lados del acceso de la puerta principal, donde se encontraban dos sirenas de bronce sobre pedestales y otras menores en las jambas de la portada. De hecho, el nombre de «Casa de las Sirenas» se debía a estas mitológicas esculturas.
Cuando pasaron seis años tras su construcción, el marqués de Esquivel vendió la casa y desde entonces, pasó por varios dueños y cumplió diversas funciones tan variopintas como casa de citas. Desde la década de 1980, la casa estuvo abandonada y se deterioró hasta un punto en el que robaron las rejas y las sirenas de la entrada (más tarde se hallaron en un chalet de Castilleja de la Cuesta).
Al parecer, el fantasma era un descendiente de la familia Portilla que estaba confinado en la casa por su condición homosexual. Algunos sostienen que se trataba de una reclusión voluntaria como castigo por su orientación y otros creen que eran los propio familiares los que lo tenían atado porque no querían que el «pecado» saliera a la luz. No se sabe si su muerte fue natural o provocada, pero de lo que sí se tiene constancia es de que el fantasma que habita en la casa es él.
A día de hoy, el Ayuntamiento de Sevilla es el Centro Cívico del Distrito «Casco Antiguo» y en él se organizan numerosas actividades culturales. Sin embargo, los guardias de seguridad vuelven a asegurar que en la Casa de la Sirenas suceden hechos paranormales confirmando el esoterismo de este palacio encantado.
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