En el imaginario colectivo sevillano imperan iconos visuales ineludibles como la Esperanza de Triana, recientemente sometida a la datación por radiocarbono del Centro Nacional de Aceleradores (CNA) a través de la prueba carbono 14. Del informe en cuestión se desprende que la madera de la Trianera podría datar en un rango del año 1460 hasta el 1635.
Así lo ha dado a conocer la Hermandad de Triana, que ya puede afirmar que el bloque de madera que se transformaría en esta popular imagen se cortó hacia finales del siglo XVII. Si bien se tienen ciertas sospechas para situarla más hacia el final de este rango de tiempo, se demuestra que la talla es vetusta, mucho más de lo que los historiadores habían afirmado hasta el momento.
La datación por radiocarbono logra una aproximación a esa fecha en que un organismo viva «deja de interaccionar con el medio ambiente, y por tanto deja de incorporar el C14 ambiental», señala el documento. En todo caso, incide el informe, no «se data la manufactura de la obra en sí misma».
El procedimiento del carbono 14 en la Esperanza de Triana
El método, grosso modo, es el siguiente. En primer lugar, iniciar todo un protocolo de limpieza a través de disolventes orgánicos y eliminar así tintes o pegamentos. A continuación, combustionar la muestra a fin de generar dióxido de carbono hasta transformarse en grafito.
Es en este punto cuando se lleva a cabo la Espectrometría de Masas con Acelerador, que determina la concentración de carbono 14. De todo ello se obtiene la Edad de Radiocarbono Convencional, de la cual se obtendrá una edad cronológica estimada, tras someterla a un proceso de calibración.
En este caso, el estudio ofrece una aproximación del momento en que pudo tallarse el árbol del que proceden las muestras de madera de la mascarilla de la Esperanza de Triana. Del análisis de esta madera, también denominada M1 CNA6349, han surgido tres rangos posibles de datación. A saber: del 1460 al 1465 (con un 1.5% de probabilidad); del 1467 al 1529 (39.7%) y del 1539 al 1635, que ofrece un 58.8% de probabilidad.
«Como se puede observar, el tercer rango es el más probable, pero no debemos caer en el error de pensar por ello que podemos obviar los otros -explica el informe, salvo que tengamos alguna otra información adicional, ajena a la prueba de la datación».