Ya te contábamos en artículos anteriores que el encanto de Sevilla no se encontraba tan solo en la ciudad.
Salir de la yema del huevo tiene grandes beneficios y os permite descubrir pequeños pueblos que no conocías, como es el caso de Carmona, municipio que tiene su origen histórico hace más de 2000 años, siendo testigo de grandes civilizaciones como la fenicia, la musulmana y la romana. Para todo aquel que todavía no ha descubierto los atractivos turísticos de este pueblo te informamos que se encuentra a 28 kilómetros de Sevilla y que podéis hacer todas estas cosas…
1. Visitar el Alcázar de la Puerta de Sevilla
Es uno de los monumentos más emblemáticos del municipio. Esta fortaleza fue construida en la parte oeste con el fin de proteger la zona más débil de la ciudad. Te recomendamos que subas a la Torre del Oro para que puedas disfrutar de las mejores vistas. A los enamorados de la historia os impresionará lo bien que se conserva la muralla.
2. Alcanzar el cielo con la torta inglesa
Al igual que tienes que empaparte de la historia de Carmona, también es fundamental que hagáis ruta gastronómica y pruebes esta delicia, conocida como torta inglesa. Se trata de un un hojaldre relleno de cabello de ángel y espolvoreado con azúcar glas y canela. También hay de trufa o nata, aunque nosotros te recomendamos el dulce original.
3. Pasear por sus escenarios de cine
La casa de Bernarda Alba, Solas, Carmen o Nadie conoce a nadie son algunas de las películas que han sido rodadas en Carmona. ¿Casualidad? En absoluto. Sus palacios, iglesias, conventos y campos de cereales hacen de ella un lugar maravilloso en el que merece la pena perderte por sus calles.
4. Conocer el conjunto arqueológico de Carmona
A todos aquellos que disfruten con el turismo funerario van a quedar satisfechos cuando descubran la Necrópolis datada en el siglo I a.C. Es muy curioso porque aprenderéis cómo eran los entierros según la clase social y los tipos de tumba que existían. También es importante que visites el Anfiteatro romano y el Museo Arqueológico para comprender qué pasó en Hispania durante la ocupación romana.
5. Comer de lujo en La Yedra
Comer es un arte y más si lo haces en el lugar apropiado. La Yedra (C/ General Freire, 6) es una de las mejores opciones para probar las delicias culinarias carmonenses. Aunque no se trate del restaurante más económico de Carmona, sí que merece la pena pagar por disfrutar de su arroz con alioli o de la encantadora terraza.
6. Descubrir las Casas Palacio
No puedes irte de Carmona sin visitar estos monumentos. Algunas se han convertido en un hotel, como la Casa Palacio de Carmona, un palacio renacentista del siglo XVI en el que podrás ver el esplendor de las familias aristocráticas del municipio. Otra Casa Palacio de interés es de los Domínguez, que es a día de hoy la Biblioteca Pública y el Archivo Municipal.
7. Cata de aceite
Una experiencia imprescindible (y diferente) para conocer uno de los manjares de nuestra tierra: el aceite de oliva. Antes de volver de vuestra excursión, es conveniente hacer una parada en la oleoteca ‘Naranjos y Olivos’, el grupo de Aceites Basilippo. Se encuentra en la Campiña de Los Alcores y vivirás un viaje a través de los sentidos.