Muchos aseguran haberlo visto nadando por el Guadalquivir, otros creen haberlo visto por los pubs de la Alameda y los hay que dicen que vive en el campanario de la Giralda y es nuestro Quasimodo sevillano. Sin embargo, el duende no se deja ver así como así y solo los sevillanos más auténticos son capaces de detectar a este ser. Es por eso que nosotros queremos compartir con vosotros unas imágenes en las que solo las almas más sevillanas sentirán el duende por su sangre cuando las vean: