Es tentador pensar que pocas de las personas de Sevilla que lean este artículo llegarán vivas hasta 2100. Por eso es divertido plantearse cómo será el mundo –cómo será Sevilla– dentro de ocho décadas. La proyección imaginativa involuntariamente remite a un universo futurista del que la IA no se escapa en la pregunta gráfica y casi plantea un Sevilla a medio camino entre Blade Runner y Futurama. En lo textual, sin embargo, es mucho más prudente.
Es curiosa esta divergencia de criterios –imaginativo en lo gráfico y prudente en lo textual. Como si lo gráfico aceptara mucha más ficción y abstracción que lo escrito. La IA textual que hemos consultado es la ya famosa chat.openai. Y la respuesta varía poco o casi nada en función de los años que le preguntes. Lo que no quita que no se pueda extraer una sobria conclusión: hay cuatro factores que definirán el futuro de las grandes ciudades en los próximos años.
Para la parte gráfica, por cierto, hemos usado Midjourney, que recrea imágenes a partir de descripciones detalladas.
La opinión de la Inteligencia Artificial
El del cambio climático es el más determinante y es el primero. La previsión en Sevilla es que alcance las temperaturas de Marrakech de cara a 2050. El verano será difícilmente soportable. Los otros tres factores son la urbanización, los cambios culturales y sociales y las nuevas tecnologías. Todos, realmente, bastante impersonales y poco adaptados a Sevilla. La respuesta completa es la siguiente:
«Es difícil predecir exactamente cómo será Sevilla en 2100, ya que depende de muchos factores, como el crecimiento de la población, el desarrollo económico, los avances tecnológicos y el cambio climático. Sin embargo, algunos cambios potenciales que podrían ocurrir en Sevilla para 2100 incluyen:
- Urbanización: Sevilla podría seguir urbanizándose, con aumento de población y desarrollo de nuevas edificaciones e infraestructuras.
- Tecnología: Sevilla puede ver la adopción de nuevas tecnologías que podrían mejorar la calidad de vida de sus ciudadanos, como los avances en el transporte, la producción de energía y la comunicación.
- Cambio climáticos: Sevilla podría experimentar cambios de temperatura, precipitaciones y otros patrones climáticos. La ciudad puede necesitar adaptarse e implementar medidas para mitigar los impactos de estos cambios.
- Cambios culturales y sociales: la cultura y la sociedad de Sevilla podrían seguir evolucionando a medida que la ciudad se adapte a los nuevos desafíos y oportunidades.
En resumen, es difícil predecir cómo será Sevilla en 2100 con certeza, pero es probable que experimente cambios significativos debido a factores como el cambio climático, la urbanización, los cambios demográficos y las nuevas tecnologías».
