Historias para no dormir en uno de los pueblos más bonitos de Sevilla.
Hay personas que se creen al pie de la letra todo lo que cuenta Iker Jiménez y otras no creerían en lo paranormal ni teniendo frente a ellos a un ejército de zombies. Sin embargo, hay un lugar en la provincia de Sevilla que hará que hasta los más escépticos empiecen a creer en el más allá: el Monasterio de la Huerta de San José en Carmona.
A día de hoy, el monasterio está en ruinas debido a su abandono y se ha convertido en un centro de peregrinación para todos los amantes de lo paranormal. Aunque parezca que fue construido siglos atrás, realmente se levantó en los años 40 del siglo XX. Se creó como un convento de frailes carmelitas de San José en la zona que se conoce como huerto de los frailes. Desempeñó la función de colegio y convento durante dos décadas, tras las que se clausuró. Se dice que el responsable del cierre fue un fraile que fue enviado a este destino y cuando ascendió, hizo todo lo posible porque cerrase.
La leyenda del fraile
Es curioso porque en Carmona hay otro convento desaparecido de la misma advocación que data del siglo XVII. A él le corresponde una leyenda sobre un maligno fraile que se ha atribuido erróneamente al Monasterio de la Huerta de San José.
Esta leyenda mal atribuida cuenta la historia de un fraile que se despertó en mitad de la noche y fue a una sala en la que se guardaba comida. En ella había unos ganchos de los que colgaba la carne, pero lo que vio allí colgado el fraile fue el cádaver de todos sus compañeros. Al fondo de la sala estaba el mismo diablo que se declaró el autor de la masacre y le dijo: «Ve y di que Satán que está aquí».
Aún más curioso es que esta leyenda se refuerza en el Monasterio de la Huerta de San José cuando bajas al sótano edificio y descubres unos ganchos como los que describe la historia de la matanza.
Pinturas y psicofonías
Los sucesos paranormales se refuerzan con testimonios como el de la empresa cultural Adarve, que cuenta que realizó una visita guiada por el convento y al finalizar la ruta se tomaron fotos de los asistentes. En estas imágenes se veían cosas fuera de lugar como siluetas en la ventana o sobre la cabeza de los visitantes, e incluso la cabeza sin cuerpo de una cabra.
Por el monasterio también se pueden ver pintadas en las paredes con estrellas de cinco puntas, restos de animales sacrificados u hogueras. Psicofonías grabadas en el edificio revelan frases como «Ya no santo», «muerte» o «rezad aquí». Incluso hay quien afirma que ha oído cantos gregorianos.
Por todos estos motivos, no nos extraña que este convento sea conocido como el «Monasterio del Diablo».
Te dejamos unas psicofonías grabadas en el Monasterio, las cuales no te recomendamos escuchar de noche.
Fuente de la información: El Correo Web / ABC de Sevilla / El País
Fuente de la imagen de portada: Wikimedia Commons