El consejero de la Presidencia y portavoz de la Junta, Elías Bendodo, ha comunicado en la rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno, que el aforo de los bares de copas se reduce a un 60% de aforo en el interior. Además, el grupo máximo de reserva de mesa en un restaurante pasa de 25 a 12 personas.
Asimismo, los locales de ocio nocturno andaluces tendrán que contar con un sistema de identificación de las personas que accedan a ellos a fin de poder realizar un «rastreo más efectivo» en el caso de confirmarse algún caso positivo por Covid-19. El consumo de alcohol en las barras volverá a quedar prohibido.
Estas nuevas medidas también se aplicarán en las discotecas, aunque con algunos matices. Junto al registro de los usuarios, el acceso deberá hacerse a través de reserva previa o dejando los datos personales a la entrada del establecimiento. La Junta ha decidido adoptar estas medidas a la luz de la segunda evaluación de la situación del coronavirus en Andalucía, ya que el ocio nocturno es una «de las principales puertas del contagio». El cierre también sufre modificaciones y tendrán que cerrar a las 5 de la mañana en lugar de las 7.
Sanciones
Los consejeros de Presidencia y de Salud han explicado que las sanciones para quienes incumplan estas medidas se asimilarán a las de la Ley de Salud Pública. Estas establecen multas de hasta 600.000 euros para los incumplimientos muy graves. El Consejo de Gobierno aprobará el próximo martes 4 de agosto el decreto con el detalle de estas multas.
Con esta premisa, Bendodo ha destacado que todas las decisiones, bien para avanzar o para retroceder, siguen siempre criterios estrictamente sanitarios.