El último hilo que se ha hecho viral en Twitter ha sido la divertida narración de un sevillano.
La cuenta de Twitter @retretuit ha compartido una historia con un sello indudablemente sevillano. ¿Quién no establecido una curiosa amistad con un erasmus? ¿Quién no tiene anécdotas al respecto? Y todas ellas traen consigo un puñado de bromas. Este caso no es diferente y desde luego merece la pena pararse a seguir esta historia que ha triunfado en las redes.
@retretuit narra la llegada de Gunnar, un joven erasmus de Noruega, a la capital hispalense y todas sus perspicacias dignas de contar.
Gunnar es un guiri al uso, con sus distancias sociales y meteduras de pata protagonizó un momento épico. El noruego se sorprendió al ver que los árboles en la calles tenían naranjas. Preguntó a @retretuit si éstas podían comerse, a lo que el guiri se dispuso a probar una. Podéis imaginar su reacción aunque para que no os perdáis la historia al detalle, adjuntamos el hilo a continuación.
Os voy a contar una historia que me ocurrió en mis años mozos universitarios allá en la Sevilla de mediados de los 90, en pleno apogeo del britpop, de las sudaderas Umbro y de peinarse con un folio. Dentro hilo.
— Retrete tuitero (@retretuit) November 22, 2019
Gunnar no hablaba nada de castellano, lo típico, hola, paella, olé, flamenco y esas cosas… Nos comunicábamos en su perfecto inglés y mi inglés de Triana. Suficiente. Pues un día, de paseo por el centro, mientras las chicas hacían alguna compra, nosotros charlábamos
— Retrete tuitero (@retretuit) November 22, 2019
Naranjas, le digo. Orange? Me pregunta. Ji, le contesto. Entonces llega el momento clave de la historia, junta los cinco deditos de la mano derecha y se los lleva a la boca así como tiqui, tiqui, tiqui. ¿To eat? Pregunta.
— Retrete tuitero (@retretuit) November 22, 2019
Para el que no lo sepa, las naranjas callejeras de Sevilla están más fuertes que la radio de un sordo, te cae una gota de zumo en el ojo y parece que has estado quemando neumáticos en un ascensor. Más fuerte que sus muertos.
— Retrete tuitero (@retretuit) November 22, 2019