Todos llevamos Sevilla en el corazón, pero hay personas que necesitan llevarla en más sitios, y por ello se la tatúan en la piel.
Seguro que alguna vez has sopesado la idea de tatuarte algo, ya sea tu equipo de fútbol, el nombre de la madre que te parió en élfico o un montadito de pringá. Todo es cuestión de gustos, pero lo que está claro es que hay tatuadores que han conseguido hacer de la piel el mejor lienzo.
De momento, nosotros no nos hemos hecho ningún tatuaje de un monumento sevillano, pero después de ver estas barrocas composiciones, ¿quién sabe? Lo mismo un día nos atrevemos a tatuarnos el Arco de la Macarena en la espalda, o incluso tú, tal vez acabes con el rostro del Cristo del Gran Poder en el brazo.
Aquí te damos un par de ideas
No es discreto precisamente, pero no se puede negar que el artista ha clavado el rostro de la Macarena. Es perfecto para dejar claro cuál es tu Hermandad.
Una frase en italiano, un escudo del Sevilla con forma de corazón y una Giralda son la composición de este diseño de alguien, cuya habilidad deductiva, nos hace sospechar que es sevillista.
A continuación, un tatuaje nostálgico donde los haya. Y es que la Expo del 92 hizo mella en la capital hispalense, pero Curro se quedará siempre en nuestros corazones.
Susana Chavero también ha demostrado ser una maestra a la hora de retratar al Cristo de los gitanos con una maestría digna de Murillo, las cosas como son. Aunque cambiando el lienzo por la piel, claro.
Premio para el que adivine de qué equipo es la persona que lleva este tatuaje con efecto «muro en ruinas».
Sospechamos que esta persona no termina de encajar muy bien comentarios como “el médico me ha dicho que tome mucha agua, o en su defecto, Cruzcampo”.
Cuando esta persona diga «tengo ojos hasta en la pierna», lo dirá literalmente. Concretamente, lleva sobre su piel la mirada de la Esperanza de Triana.
Originalidad no se le puede negar a esta matrioska de costalero. ¡Al cielo con ella!
Os dejamos con más ejemplos, no os penséis que se acaban. Por ejemplo, este amigo sevillano no puede tener más el barrio en las venas.
Ojito a esta sillita flamenca auténtica.
Y con motivo de la boda del siglo en Sevilla, un poquito de Ramos a flor de piel.
Y para culminar, una mezcla entre la muñeca de ‘La gitana loca’ y la flamenca de whatsapp.
