Año 2017. Nos encontramos en una pequeña entidad local autónoma del municipio de Utrera (Sevilla), El Palmar de Troya, famosa por la Iglesia palmariana, una escisión de la religión católica que cuenta con su propios papas.
No, no tiene nada que ver con una película de ciencia-ficción protagonizada por Tom Cruise, pero sí está relacionada con el actor en un tema común: las sectas. Lo que daría en Hollywood para una película de persecuciones, descubrimientos e intrigas internacionales a lo «Código Da Vinci», en Sevilla se convierte en una mezcla entre Expediente Warren y la filmografía de Esteso y Pajares.
Para empezar, tenemos grandes personajes como el papa que lo dejó todo por amor, una mujer que vio a la Virgen con el manto del Carmelo (las apariciones marianas es un ingrediente que no puede faltar en estas historias) y un hombre que dice ser coronado papa por Jesucristo y con sus santos designios funda la secta Iglesia Palmariana.
Esta insólita religión nos daría material para llenar el Archivo de Indias, pero por lo pronto te vamos a iniciar en el palmarianismo con un par de curiosidades. ¿Y quién sabe? Lo mismo descubres que en el fondo de tu corazón se esconde un palmariano que quiere ser liberado:
1. El origen de la Iglesia palmariana
Año 1968. En marzo cuatro niñas afirman haber visto a la Virgen María en la finca de La Alcaparrosa, que se encuentra a un kilómetro de la pedanía del Palmar de Troya. En abril una mujer dice que se le ha aparecido la Virgen con el manto del Carmelo en el mismo sitio. En mayo, otra vecina vuelve a tener la misma visión y en junio una mujer tiene un éxtasis místico en el que Jesús le daba la comunión con una oblea ensangrentada. Estas apariciones dieron lugar a miles de visitas a la finca de La Alcaparrosa y otros tantos videntes que recibían más mensajes divinos que en WhatsApp.
2. El fundador
Aprovechando el tirón que tuvieron las visiones, Clemente Domínguez se subió a la ola y dijo haber sido coronado místicamente por el propio Jesucristo en una visión y que era el mismísimo sucesor de Pablo VI. Desde ese momento se hizo llamar Gregorio XVII, instaló una Santa Sede (algo más low-cost que la original) y nombró a sus cardenales. Eso sí, previamente excomulgó a Juan Pablo II por ser un precursor del Anticristo y ejerció como líder hasta 2005.
3. ¿Qué me encuentro en una misa palmariana?
Si alguna vez tuviste la intención de ir a una misa de gospel en Estados Unidos, olvida esa idea y confórmate con Sister Act. Lo que hay que vivir de verdad es una misa palmariana. Para empezar, esperamos que hayas estudiado Humanidades porque las misas son en latín. Si eres mujer, tienes que llevar velo e ir cubierta con ropa muy formal y ni si te ocurra ir con pantalón, ya que sería una afrenta para los palmarianos. A los hombres simplemente se les exige ir bien cubiertos y con ropa formal.
Por supuesto, para que todo quede en «familia», no se puede hacer ninguna foto o grabación y lamentándolo mucho, no puedes entrar si no eres palmariano.
4. La lista palmariana
La Iglesia del Palmar reconoce a todos los canonizados por la Iglesia Católica hasta la muerte de Pablo VI en 1978. En esta lista podemos encontrar nombres de tan candente actualidad como Cristóbal Colón, Don Pelayo, el Cardenal Cisneros, José Calvo Sotelo, Josemaría Escrivá de Balaguer, Primo de Rivera, Carrero Blanco o el mismísimo Francisco Franco, al que consideran el salvador de la iglesia. Por esa razón, el dictador tenía una estatua en la fachada de la Santa Sede.
Pero si hay algo mejor que la lista de los canonizados es la de los excomulgados en la que figuran los papas, cardenales y obispos de la Iglesia católica posteriores a Pablo VI, la Familia Real, los sacerdotes obreros, los comunistas y socialistas, todos los superiores de órdenes religiosas de la Iglesia católica (a excepción del Opus Dei) y lo mejor de todo… ¡Los espectadores de Jesucristo Superstar!
Un poco más y aparece Mecano en la lista.
5. El pájaro espino del Palmar
La Iglesia palmariana sufrió una crisis con el papa Sergio María (AKA Gregorio XVIII). Este ex seminarista y ex militar murciano abandonó el papado y la vida religiosa por amor. No contento con saltarse todos los preceptos de su iglesia, declaró en 2016 que «Todo ha sido un montaje sobre todo económico. Aprovechándonos del milagro de la virgen».
Duras palabras para la Iglesia del Palmar de Troya.
A día de hoy, la Iglesia del Palmar de Troya sigue en activo con el papa Pedro III, aunque sospechamos que algún pequeño problema jurídico como la evasión fiscal y la investigación de la Fiscalía de Menores podrían acabar con ella.
Y recuerda que si quieres ser palmariano, estás autorizado a ver películas como La vida de Brian o La última tentación de Cristo, pero ni se te ocurra ver bajo ningún concepto el musical más pernicioso de la historia del cine: Jesucristo Superstar.
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