Hace poco hablábamos con Carlos Jiménez de La Odisea de la Historia y nos contaba que en Sevilla tenemos lugares que no se terminan de explotar turísticamente y era una pena porque tenía un gran valor histórico. Uno de los caso más destacables es el Museo Arqueológico, antiguo Pabellón de Bellas Artes, un edificio que en sí mismo es una joya arquitectónica de Aníbal González.
Todavía son muchos los que no conocen el interior de este museo o creen que no hay nada de interés en su interior. Sin embargo, cuando terminen de leer este post no dudarán en visitarlo la próxima vez que pongan un pie en la Plaza de América:
1. Venus de Itálica (117)
Esta escultura del siglo II d. C., coincide con el mandato de Adriano, emperador del Imperio romano (117 – 138) y reproduce el modelo de «Afrodita Anadyomene». A modo anecdótico, la encontró una familia de Santiponce semi-enterrada en su casa y como solo se veía su hombro, usaban este para cascar nueces.
2. Estatua de Trajano heroizado
La estatua se descubrió en Itálica en el año 1788 y se erigió en tiempos de Adriano. El emperador hispano adopta la actitud del general en jefe (imperator).
3. Busto de Adriano
Es uno de los mejores retratos que conservamos del emperador hispano. Procede de Itálica y se realizó en torno a los años 135-140 d.C. Como elemento de divinización, lleva un relieve de la cabeza de la Gorgona Medusa.
4. Diosa Astarté
Es una pequeña escultura que representa a la diosa fenicia Astarté, sentada en un escabel. En la parte frontal podemos leer un mensaje en fenicio cuya traducción sería: «Esta ofrenda la ha hecho B’lytn, hijo de D’mlk, y Bdb’ l, hijo de D’mlk, hijo de Ys’l, para Astarté, nuestra Señora, porque ella ha escuchado la voz de su plegaria» Se trata de la prueba del fenicio escrito más antigua de la historia.
5. Mosaico del Juicio de Paris
El mosaico representa un pasaje de La Ilíada en el que las diosas Atenea, Hera y Afrodita, se disputan la manzana de oro (símbolo de belleza) antes Paris y Hermes. Esta obra de arte formaba parte del pavimento de una ostentosa villa imperial y su importancia se debe a que era un tema iconográfico inédito en la Península Ibérica.
6. Tesoro del Carambolo
Se encontró casualmente en la reforma de un edificio en Camas en 1958. Las joyas estaban ocultas en una estructura oval junto a huesos de animales y cerámica del tipo «carambolo». Las últimas investigaciones indican que se trata del ajuar de animales que eran sacrificados en templos fenicios dedicado al dios Baal y la diosa Astarté.
7. Ídolo de placa de Valencina
Este ídolo realizado en el Calcolítico sobre una placa de pizarra es una esquematización del rostro humano. Este tipo de objeto eran muy frecuentes en los dólmenes del suroeste de la Península Ibérica y está relacionado con el mundo funerario.
8. Exvoto de pie
Esta pieza formaba parte de un grupo de seis exvotos (ofrendas de los ciudadanos a sus dioses) en forma de lápidas, que presentan uno, dos o tres pares de pies. Algunos tienen inscripciones dedicadas a divinidades como Isis, Némesis y Dea Caelestis. Se colocaban en la entrada del anfiteatro de Itálica y simbolizaban las huellas de las divinidad.
9.Codex Pugilllaris
Son 5 tablillas que en su día se cubrían de cera y se usaban para escribir sobre ellas. Era una especie de «agenda«, ya que se podía borrar el texto cuantas veces quisieras.
10. Cabeza de Alejandro Magno
Se encontró en Itálica y aunque todas las teorías apuntan a que es la cabeza del rey de MacedonIa, hay otros autores que barajan que sea Antinoo, el efebo de Adriano.