A lo largo de la historia, Sevilla ha sido cuna de numerosas civilizaciones, aunque sin duda, una de las que más influyó en la configuración de la ciudad fue la población romana. Híspalis era la forma en la que denominaban los romanos a Sevilla. Posteriormente, Julio César la llamó Iulia Romula Hispalis y se convirtió en uno de los centros industriales más importantes de la Bética.
Desde el año 206 a.C., Sevilla fue romana, así que no es de extrañar que todavía queden restos arqueológicos donde podemos ver la huella del Imperio Romano:
Estos restos pertenecen a un acueducto romano que se reconstruyó a posteriori por los almohades. Fue construido entre los años 68 y 65 a.C., siendo en esa época Julio César, cuestor de la ciudad. La razón por la que se llaman «Caños de Carmona» es que el acueducto terminaba en la Puerta de Carmona. Actualmente, solo quedan 3 tramos que se pueden ver en la calle Luis Montoto y en la intersección de la avenida de Andalucía con la Ronda del Tamarguillo.
Templo romano en la calle Mármoles
En el corazón del barrio de San Bartolomé te encontrarás con un patio algo escondido en el que se encuentran 3 columnas de 15 metros de altura. Pertenecían a un templo romano y es uno de los poco restos arquitectónicos que tenemos de la antigua Colonia Iulia Romula. Antes había 6 columnas, pero se llevaron 2 a la Alameda de Hércules (para sostener las famosas esculturas de los fundadores de Sevilla) y la otra se facturó durante el traslado al Real Alcázar que llevó a cabo el rey Don Pedro I.
Antiquarium
Cuando empezaron las obras de Metropol Parasol (las Setas) quedaron al descubierto unos restos romanos y una casa islámica almohade de los siglos XII y XIII. En este conjunto arqueológico se pueden ver los mosaicos de la Casa Romana, la Casa de la Ninfa y la Casa de Baco y un mural en el Patio del Océano. También cuenta con la Casa de la Columna, donde se halla el mosaico de la medusa, la Casa de las Basas, la Casa del Sigma, la Casa de la Noria y el Hospitium de los Delfines.
Foro Romano
Aunque no se conserve prácticamente nada, el foro romano se encontraba en la actual Plaza del Salvador. En esta zona había templos, termas, mercados y otros edificios públicos . De hecho, en el subsuelo se encuentra un templo romano bajo la iglesia del Salvador, una gran cisterna bajo la Plaza de la Pescadería y unas termas que estarían en el espacio que ahora ocupa el Palacio Arzobispal.
Murallas
Fueron las primeras murallas defensivas de la ciudad y databan de la época de Julio César. Sustituyeron a una empalizada anterior, la cual estaba hecha con troncos y barro. Posteriormente, los árabes derribaron las murallas y las sustituyeron por las que tenemos a día de hoy.
Fuente de la imagen de portada: Sevilla Daily Photo