Probablemente sea el emblema de Sevilla por antonomasia, con permiso de la Giralda.
Son muchos los turistas que se esperan una torre de dimensiones parecidas a las del Big Ben y luego se sorprenden al ver la escasa altura del edificio. Aunque si hay algo innegable es que pocas estampas lucen tanto en nuestra ciudad como la visión que compone este edificio junto a la orilla del Guadalquivir, con la Maestranza y la Giralda a sus espaldas. Te emocionas cada vez que la ves de noche desde el Puente de San Telmo, pero probablemente no conocieras estas 7 cosas:
Con altura
Su altura es de 36 metros, poco más de un tercio de lo que mide la Giralda con sus 94,69 metros.
De apellido albarrana
Es una torre albarrana, es decir, formaba parte de un recinto fortificado, con el que estaba comunicado. Su función principal era defender la ciudad. Otro edificio con estas mismas características en Sevilla es la Torre de la Plata.
¿Del oro?
Se dice que su nombre se debe al brillo dorado que reflejaba la torre sobre el río. En la restauración de 2005, se averiguó que este brillo, anteriormente atribuido a un revestimiento de azulejos, se debía a una mezcla de mortero de cal y paja prensada.
Tres cuerpos, tres períodos
La Torre del Oro tiene tres cuerpos perfectamente distinguibles y cada uno de ellos fue construido en un período distinto. El primer cuerpo fue construido entre 1220 y 1221 por orden del gobernador de Sevilla almohade Abù I-Ulà. El segundo cuerpo fue obra de Pedro I el Cruel en el siglo XIV. Por último, en 1760 el ingeniero militar Sebastián Van der Borcht finalizó la torre con otro cuerpo rematado en cúpula.
Casi destruida
La Torre del Oro ha atravesado varios momentos complicados, pero uno de los más críticos fue durante la Revolución de 1868, cuando los revolucionarios demolieron los lienzos de las murallas y los pusieron a la venta. Gracias a la intervención de los hispalenses, que se opusieron en todo momento, la Torre no fue destruida.
Una hermana lusa
El 13 de agosto de 1992, año de la Exposición Universal de Sevilla, la Torre del Oro se hermanó con la Torre de Belem en Lisboa.
¿Y dentro?
Desde el año 1944 su interior alberga un Museo Naval. En el museo se pueden ver maquetas, documentos históricos, grabados, cartas naúticas e instrumentos de navegación.