Decía la célebre frase de Antonio Gala: «Lo malo no es que los sevillanos piensen que tiene la ciudad más bonita del mundo… lo peor es que puede que tengan hasta razón«. Y si lo dice el escritor de Ciudad Real, es que se trata de una opinión totalmente objetiva y con fundamento. Podríamos dar hasta 50 razones por las que la frase de Antonio Gala es verdadera, pero preferimos deciros qué 10 experiencias son las que hay que vivir en Sevilla antes de morir…
1. Un atardecer desde el Puente de Triana.
2. Perderte por las calles de la Judería.
3. Montarte en una barca de la Plaza de España.
4. Subir a la Giralda y contemplar sus increíbles vistas
5. Ir con tu pareja a los rincones más románticos del Parque de María Luisa.
6. Ver un amanecer con la Catedral en primer plano.
7. Entrar al Rectorado y no ser capaz de encontrar la salida.
8. Pasear por la calle Tetuán mientras que escuchas a sus músicos que te alegran el día.
9. Subir a las Setas de Sevilla y maravillarte con sus particulares vistas.
10. Pasar un día entero en la Alameda de Hércules.