Si hay una persona que desde hoy va a ser non grata en Andalucía esa es Carlos López, el obispo de Salamanca, que pretende acabar con los términos de origen andaluz que se utilizan en la Semana Santa salmantina, especialmente los capataces que usan el mismo vocabulario a la hora de mandar los pasos.
La Gaceta de Salamanca también ha informado acerca de la opinión del obispo sobre el andaluz, el cual le parece un tema preocupante, ya que el andaluz no es una forma de hablar normal y suena hasta mal.
Por otra parte, José Cornejo, presidente del Consejo de Salamanca, ha enviado una carta a los 17 hermanos mayores para trasladarles su inquietud del prelado: «los jefes de paso utilizan en sus desfiles procesionales un marcado acento andaluz». El obispo López no entiende porque todo el año se habla normal y los días de procesión «se utilice un acento que nada tiene que ver con la ciudad en la que vivimos».
Fuente de la noticia: ABC de Sevilla – Manuel Jesús Rodríguez Rechi