¿Todavía te quedan cosas que hacer en Sevilla? ¡Aún estás a tiempo!
1. Subir a la Giralda y no morir en el intento con sus 35 rampas.
2. Probar las croquetas de Casa Ovidio.
3. Indicar a un guiri cómo se llega a Plaza España.
4. Pasar un día entero en el Parque del Alamillo.
5. Quedar en Plaza Nueva y llegar tarde.
6. Perderte de noche por el Barrio de Santa Cruz.
7. Ir al cine Cervantes y descubrir el encanto de sus maderas que crujen.
8. Ir a los Baños Árabes y arrepentirte de no haber ido antes.
9. Hacerte una foto en el Puente de Triana con la calle Betis de fondo.
10. Llevarte rebujito para la Feria… y que te lo quite la policía.
11. Subir a la Terraza del Corte Inglés del Duque y posturear haciéndote una foto con la Giralda de fondo.
12. Montarte en las barquitas de Plaza España y llegar al final del recorrido.
13. Ver una actuación de flamenco de verdad en el Museo de Baile Flamenco y no las estafas con las que sablan a los de fuera.
14. Ir a Isla Mágica y montarte en el Jaguar (los que estudian/trabajan en Cartuja odian esto).
15. Pasar una tarde recorriéndote todas las plantas de la Fnac.
16. Ver amanecer desde el Muelle de las Delicias.
17. Ir a la heladería Bolas y agobiarte por no saber qué sabor escoger.
18. Quedar en el centro para comer/cenar y ante la duda acabar en Los Coloniales.
19. Probar el alcohol de todos los bares de la Alfalfa.
20. Ver un clásico de cine en el CICUS.
21. Descubrir la increíble biblioteca que hay dentro del Parlamento.
22. Tomarte una cervecita un sábado en El Salvador.
23. Montarte con tus amigos en un cuadriciclo del Parque María Luisa y dejar que los demás pedaleen por ti.
24. Llevar a una visita de fuera a la Plaza de España para que se haga una foto con la imagen de su provincia y con sus pies en el mapa.
25. Probar la tapa del huevo de bizcocho de boletus del Eslava.
26. Pasar en pleno verano por las fuentes del suelo de la Alameda.
27. Asombrarnos por todo lo que podemos ver dentro del Museo de Bellas Artes y ver el famoso retrato de Bécquer.
28. Ir a ver un derby entre el Sevilla y el Betis.
29. Ver pasar por el Arco a la Macarena.
30. Tener una cita y llevarla a la Glorieta de Bécquer.
31. Visitar los Alcázares de noche.
32. Comprarte palodú en el centro.
33. Tomarte un mojito en la Cacharrería.
34. Ir a pasar un rato por la noche a la Alameda y acabar amaneciendo en un puesto de churros.
35. Ver a Howard, el negrito de Plaza de Armas, vendiendo pañuelos.
36. Hartarte de merengues de La Campana.
37. Tomarte una copa en el EME de noche (y no más si no quieres gastarte el sueldo del mes en una noche).
38. Tomarte las uvas en Nochevieja en Plaza Nueva.
39. Ir al Patio de San Eloy y comer sentado en las gradas.
40. Pasar una noche en el Acuario de Sevilla (sí, se puede).
41. Comer un montadito de pringá en Bodeguita Romero.
42. Ver una obra de teatro en el Lope de Vega.
43. Ir a la cámara oscura de la Torre de los Perdigones.
44. Estar un día entero viendo películas en el Festival de Cine Europeo.
45. Correr por el río de noche.
46. Hacer una ruta para conocer Triana.
47. Pasar por la calle Susona y contar a la gente a qué se debe el nombre.
48. Hacer una ruta por los pabellones de la Expo del 92.
49. Hacerte una foto en el ascensor psicodélico de Las Setas.
50. Entrar al Rectorado, perderte en sus pasillos y decir “esto parece Hogwarts”.